
"Cabría preguntar entonces cómo es que logró articular un movimiento escolar multisectorial, si la reforma ha socavado los nexos que construyen el espacio público"
(Respuesta al artículo citado, publicado en "La Pelota de Trapo" VER TEXTO COMPLETO)
A propósito de efectismos...
Me parece, y sólo me parece (aunque quisiera estar equivocado), que tan efectista han sido las reformas históricamente cosméticas como la reciente y mal llamada "revolución pingüina" (sí, con minúsculas).
Articular cualquier alzamiento popular hoy en día es muy fácil, y como no pretendo promover los actos vandálicos, me ahorraré las recetas.
Pero habiendo la motivación (justificada plenamente), acceso a los medios de comunicación, y principalmente, una multitud ávida de emociones y además, habiéndose presentado la oportunidad, y quizá tan importante como todo lo anterior, la espectacularidad de la cobertura mediática y el aprovechamiento político (mediocre, pero aprovechamiento al fin) de los sectores opuestos al oficialismo (derechas e izquierda extraparlamentaria), resulta realmente sencillo crear un cóctel social altamente explosivo, pero así como la gasolina de aviación, por ser tan volátil es altamente explosiva, al no haberse concentrado las fuerzas, de la movilización no quedó más que un fulgurante flash y la humareda correspondiente.
Haga usted la prueba. En un espacio abierto vierta 50 cc de gasolina en un recipiente abierto. Acerque cuidadosamente un fósforo y observe los resultados.
Haga el mismo experimento, pero esta vez en un recipiente que esté herméticamente cerrado aunque con suficiente oxígeno para la ignición pero no así para la combustión (tendrá que conseguir una mecha o un chispero). Observe y compare ambos experimentos. (Si lo hace a nivel del mar a 22º c es irrelevante)
Como el movimiento tuvo tanta cobertura y espacio de movimiento, la posible fuerza social que podría haber convocado se ha diluído con el paso del tiempo.

Pero, es que tampoco había mucho con qué trabajar.
¿En quién se apoyarían los estudiantes para conseguir sus demandas?
¿En los movimientos o partidos de izquierda, con su escasa habilidad negociadora, estratégica y táctica; con su presencia casi nula en las decisiones relevantes de la clase política; con sus discursos apelmazados y con olor a rancio?
¿En esa falacia a la que llaman "Sociedad Civil", en la que nadie sabe realmente de qué se trata ni a quién le hará la pega si se llega a integrar en alguna organización reconocible; o en las "organizaciones sociales", esos grupúsculos fantasmagóricos que aún gozan de personalidad juríca por el sólo ministerio de la ley y porque nadie les ha avisado que ya están obsoletos y que aparte del nombre y el timbre ya no son nada, asambleas sin quórum, organizaciones de dirigentes, o del "diri-gente" que dice representar a otra gente pero que en realidad ni representa a esa gente, ni a la gente que dice que representa les interesa ser representados... por él?
Y en la derecha... aunque quisieron repetir sus antiguas prácticas, como que no los pescaron mucho. (Algo habrá en la genética de los muchachos que los llevó a desconfiar. ¿Porqué será que la gente no confía en la derecha? Vale la pena recordar quiénes comenzaron las movilizaciones contrarias a la UP durante el 72 aleonados por los paladines del orden y la libertad... ¿acaso no fueron los estudiantes?) Dios nos pille confesados cuando les resulte.
Y, más relevante aún. ¿Quién reemplazaría a los líderes del movimiento una vez que estos se encontraran inhabilitados para continuar liderándolo? (como pasó con la mayoría, que al terminar 4º medio ya no podían permanecer en el Liceo y la única revolución en la que podrían participar en el futuro inmediato sería esperar, como todos, la micro del Transantiago)

A nadie le interesa de verdad el problema. Ya no tienen tiempo para que les interese. Triste final para algo que llenó de esperanzas a los optimistas de siempre.
De todos los futuros posibles, el peor es el más probable.
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